El corrillo habitual de estudiantes erasmus se convierte hoy en una tertulia de afectados por la nube volcánica que se ha reído de la globalización. La más tardona interrumpe la escena: “¿Eh, habéis visto esto?”. El cartel era claro: “A causa de las perturbaciones y el bloqueo de los aeropuertos, la profesora se ausentará y no podrá dar la clase este miércoles 21 de abril. Excúsenla”.
No es la única clase anulada en la Université Libre de Bruxelles (ULB). Las vacaciones de primavera en Bélgica eran del 3 al 18 de abril y el caos aéreo ha afectado de lleno a muchos estudiantes y profesores viajeros pero, sobre todo, al colectivo Erasmus. Algunos habían aprovechado estos días para volver a casa y la mayoría rondaba por la Europa del bajo coste. Es, con pruebas empíricas, uno de los rasgos distintivos de la especie Erasmus: viajar compulsivamente por la Europa de Ryan.
Las secuelas de la nube volcánica en la especie erasmus bruselense pueden contabilizarse. Después de varios días atrapados, los trenes y autobuses han sido la única solución: 36 horas desde Letonia; 22, desde Croacia, y 10 viniendo de la vecina Londres. Otros se las han arreglado para volver desde Budapest, para hacer el trayecto que une Grecia y Bruselas en dos días o para huir de Göteborg (Suecia) gracias a cinco trayectos en tren y un par en autobús.
Algunos profesores han aceptado aplazar la entrega de trabajos bajo el argumento volcánico y la asociación de erasmus Express enviaba un comunicado titulado “Importante: Gala Express y la interrupción aérea”, sobre cómo afectaba el caos a uno de los eventos más esperados del curso.
Consecuencias, al fin y al cabo, de las cenizas islandesas, que a Ryan le han afectado con una tos que tardará algún tiempo en desaparecer. La compañía con sede en Irlanda ha sido la última en reanudar sus vuelos. “Tenemos equipos de gente enviando la mayor información posible a todos los pasajeros para permitirles cambiar sus planes de viaje”, decía el consejero delegado de Ryanair, Michael O’Leary. Muchos buzones todavía esperan el mensaje.